lunes, 9 de enero de 2012

Al pie

Al pie de cualquier bosque sembré nuestra planta. Al pie de cualquier casa escondí nuestra promesa. Al pie de cualquier mar solté nuestro barco. Al pie de cualquier senda tracé nuestras huellas. Al pie de cualquier cuarto solté nuestras fieras. Al pie de cualquier calle pinté nuestro graffiti. Al pie de cualquier foto tatué nuestras iniciales. Al pie de cualquier nota edifiqué nuestra historia. Al pie de cualquier espejo grabé nuestras muecas. Al pie de cualquier museo coloqué nuestras estatuillas. Y al pie, siempre, al pie de cualquier viento sigo esperando nuestras vidas.

4 comentarios:

  1. mmmm, la verdad no tengo claro que escribirte, solo que me dio cosita cuando lo leí...

    ResponderEliminar
  2. Mako: jajajajja, a mí también me dio cosita cuando lo escribí, es raro, no? A veces me veo justo así, esperando encima del viento a que la vida se parezca a los sueños. Un beso grande y más gracias por utilizar tus MB en leerme...

    ResponderEliminar
  3. ... y es que en parte a ellos nos debemos Melissa; los sueños están allí, en el cumulo espiritual donde se guardan los sentimientos y los valores de todo lo que somos

    ResponderEliminar
  4. Ariel: así es, nos debemos a los sueños, y mira que son asombrosos!!! aunque a veces sea un poquitín duro despertar; pero por nada del mundo dejaría de tenerlos. Muchas gracias por leer. Un beso.

    ResponderEliminar